Entre los años 2009 y 2016 Carlos y Claudio Rodríguez lograron recaudar un total de $19.588 millones a través de estafas piramidales.
Así lo aseguró hoy Pablo Norambuena,el fiscal de delitos de alta complejidad oriente, y encargado de la formalización contra los ejecutivos, que se llevó a cabo hoy ante el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago.
De acuerdo a los detalles emitidos frente al tribunal, los empresarios se concertaron para captar clientes ofreciendo asesorías financieras y de inversiones, las cuales nunca fueron realizadas por la empresa. Para esto, solicitaban una inversión mínima de $50 millones, de acuerdo a la investigación fiscal, los cuales podían ser entregados en un plazo de hasta seis meses.
Para acreditar la veracidad de estas inversiones falsas, y la seriedad de la firma, los hermanos Rodríguez exhibían a sus clientes fichas bancarias falsas con el comportamiento de la empresa, mencionando además, que contaban con un comité de Ética y Cumplimiento con el objeto de prevenir delitos, de acuerdo a lo solicitado por la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS). Todo ello, para fundamentar utilidades imposibles, que podían retornar hasta un 2,1% mensual.
Sin embargo, según el fiscal, estas ganancias eran inexistentes, ya que el retorno parcial de los dineros eran utilidades falsas ya que solo era parte de fondos aportados por otras víctimas. Todos estos hechos, a juicio del Ministerio Público, corresponden a delitos de estafas reiteradas, lavado de activos, infracción a la Ley General de Bancos e Infracción a la Ley de Mercado de Valores, por lo cual se solicitó como medida cautelar la prisión preventiva.
Álvaro JéldrezIngeniero ComercialPontificia Universidad Católica de Chile