Acaba de comenzar el año 2020 y muchos traders están confeccionando su cartera de inversión para este año con la pregunta de qué activos destacarán durante el ejercicio. Para aquellos con poca aversión al riesgo, el oro podría ser un valor a tener en cuenta. Si queremos analizar el gráfico de este activo en profundidad podemos recurrir a indicadores como el Pivot Point, que nos ayudará a identificar los niveles potenciales en los cuales las oportunidades de trading serán más relevantes.
Desde el año 2010, los bancos centrales han pasado de ser vendedores netos de oro a compradores netos, especialmente Rusia y China, intentando así ser menos dependientes del dólar estadounidense. Un ejemplo significativo de esta tendencia lo encontramos en los datos del primer trimestre de 2018 proporcionados por el World Gold Council (WGC): en ese periodo, la demanda de oro se disparó un 42% interanual. Esto ayudó a impulsar la fiebre del oro en el siguiente ejercicio, 2019, ayudando a que el precio del metal amarillo cerrara con más de un 18% de subida durante el año.
Contexto a favor
La pregunta clave ahora es si esta fiebre del oro continuará en 2020. Hay muchas razones fundamentales para sugerir que los precios del oro podrían seguir esta tendencia y subir más este año, como por ejemplo las tensiones que todavía continúan por la disputa comercial en curso entre EEUU y China, la incertidumbre que rodea las elecciones presidenciales de 2020 en EEUU o las continuas preocupaciones sobre el crecimiento económico en un momento en el que los bancos centrales se han quedado sin nuevas medidas para estimular el crecimiento global. A estos factores se ha unido en las últimas jornadas la escalada de tensión en Oriente Medio por la muerte del general iraní Qasim Soleimani a manos de EEUU. Cuando se producen este tipo de tensiones los inversores suelen acudir al refugio de activos que dan seguridad, como es el caso del oro, frente a otros como el petróleo que suelen verse afectados de manera radical por estos conflictos.
El consenso del mercado también proporciona una imagen más positiva para el oro este año. Según el Consejo Mundial del Oro, el tercer trimestre de 2019 se produjo una mayor afluencia de ETFs de oro (fondos cotizados en bolsa), una tendencia que se mantiene desde principios de 2016. Por supuesto, el panorama fundamental podría cambiar en el transcurso del año. Sin embargo, el gráfico de precios del oro muestra algunas características muy interesantes como podemos apreciar a continuación.
Fuente: Gráfico mensual del Oro en la plataforma MetaTrader 5. Rango de Datos: junio de 1992 a 12 de enero de 2020.
En este gráfico mensual del precio histórico del oro, podemos observar una clara tendencia alcista a largo plazo entre 2000 y 2010. Desde 2010 hasta alrededor de 2015, el precio del oro perdió casi la mitad del valor alcanzado tras la fuerte tendencia alcista previa de la década anterior. Pero desde 2015, el precio del oro se ha consolidado, formando una cuña en el precio, tal y como podemos observar en las dos líneas negras de soporte y resistencia del gráfico anterior.
A finales de 2019, el precio del oro rompió al alza esta formación, lo que significa que los compradores han tomado el control de manera firme a principios de 2020. Como el precio del oro ya está subiendo, los traders pueden optar por buscar operaciones en marcos temporales más pequeños como el gráfico diario o de H4 para operar siguiendo estrategias de continuación de tendencia. Habrá que estar atentos para ver si al final el precio del metal alcanza su máximo histórico registrado en 2011.