¿Cuánto paga de impuestos un trabajador en Chile? (datos 2022)

Trabajar es una tarea que para algunos es muy grata pero también para otros puede ser realmente muy pesada sobre todo cuando se trata de esos trabajos que por mucha pasión y entrega que se le ponga, no quitan su objetividad de ser poco gratos pero siempre necesarios para la sociedad. Más allá de la actividad en sí, el trabajo es una actividad muy importante para la sociedad porque es nuestra forma de conectarnos a ella aportando nuestra energía, conocimiento, experiencia y entrega. Esto convierte al trabajo en una actividad que dignifica al ser humano. Servir es dignificante sin duda alguna.

En algunas sociedades existe una cultura del trabajo muy arraigada como es el conocido caso para mí de Japón, a diferencia de ello, en Chile la cultura por el trabajo no está tan desarrollada como en Japón y como en otros países orientales reconocidos por ello. Sin embargo no se puede dudar que gran parte de la sociedad chilena pone lo mejor de sí para desarrollar de mejor manera su labor con entrega a su prójimo quien termina siendo el beneficiado por ello.

Por otra parte no se puede negar que el gran motor que mueve a la población activa para justamente serlo no es meramente la cultura por el trabajo sino que la retribución económica que se puede percibir por él. Esta retribución económica llega a manos del trabajador con diferentes nombres dependiendo de su empleabilidad, si es un independiente a través del concepto de “salarios” o si es un empleado bajo el concepto de “sueldo”.

Sin importar si se trate de un trabajador independiente o uno dependiente en el presente artículo explicaré como no todo lo que parece es y mientras más se gana (de forma justamente recompensada por el trabajo que se hace), mayor es la cantidad de impuestos que el trabajador termina pagando.

Los sueldos en Chile en promedio tienden a ser muy bajos aún y esto provoca que la gran mayoría de los trabajadores ni se terminan enterando que existen impuestos que gravan sobre los sueldos porque a ellos no se los descuentan. Dentro del mundo formal (lo que el Servicio de Impuestos Internos puede detectar y por ende, por lo que se tributa) la gran masa activa se encuentra en el tramo salarial más bajo sobre el Impuesto Global Complementario (IGC), tramo que se encuentra exento del cobro de impuestos para quienes obtienen ingresos de hasta $8.266.698.- (año 2021) anuales (unos $688.891.- mensuales). Tomando en cuenta de que esta cifra se toma para su cálculo después de aplicar los descuentos previsionales (AFP, Salud y Seguro de Cesantía).

Para ir entendiendo bien cómo funciona el Impuesto Global Complementario, debo comentar que es aquel que grava sobre las rentas imponibles de manera progresiva desde los 13,5 UTM (Unidades Tributarias Mensuales) mensuales en adelante.

Si quieres conocer la tabla completa con sus tramos correspondientes, te sugiero que revises ESTE ARTICULO donde aparece el detalle del "Impuesto Global Complementario" (IGC).

Para ir aterrizando las cosas, pondré varios ejemplos de trabajadores ficticios basado en ingresos ajustados a la realidad actual (2022) y las cotizaciones e impuestos que pagan (no son precisas ya que existen gratificaciones, bonos y otros pero casi exactas a la realidad por lo que aplican muy bien a modo de ejemplo) y por supuesto que verán cuánto realmente terminan recibiendo de sueldo después de todos los descuentos correspondientes:

Un bombero de estación de gasolina que recibe un sueldo de $400.000.- brutos, recibe en realidad $323.840.- pesos líquidos. A este trabajador se le descontaron $45.760.- para la AFP, $28.000.- para su salud (FONASA) y $2.400.- para el seguro de cesantía. Sin embargo, no pagó impuestos, quedando absolutamente exento por estar en el tramo más bajo.

Tenemos a un Profesor que tiene un sueldo de $1.000.000.- bruto, de los cuales tiene descuentos de $114.400.- por AFP, $70.000.- de FONASA, $6.000.- de Seguro de Cesantía, pero además y a diferencia del ejemplo anterior (“a”), este Profesor, ingresa ya a un tramo afecto a impuestos (el más bajo de los que pagan impuestos) teniendo que pagar $2.985.- pesos de impuestos. 

Si bien es cierto que la cantidad de impuestos que paga el Profesor no es grande, este es el inicio de lo que veremos con los siguientes ejemplos donde lo que se puede terminar pagando es realmente importante.

Estamos ante un Ingeniero Civil que trabaja en una empresa de Servicios de Ingeniería. Este Ingeniero tiene un sueldo bruto de $2.500.000.- (es un muy buen sueldo para un trabajador en Chile). De este sueldo bruto, el Ingeniero tiene descuentos de $286.000.- en AFP, $175.000.- en Salud, $15.000 por Seguro de Cesantía y además paga $67.191.- en impuestos por encontrarse ya en un tramo mayor al Profesor (el tramo que le sigue que asciende al 8%).

Finalmente nuestro Ingeniero sólo recibe líquidos $1.956.809.- (no alcanza los dos millones de pesos).

Vemos que ya este nivel de impuestos aunque no es grave, sí ya es algo molesto para el trabajador porque es una cantidad de dinero, que podría hacer uso en otra cosa por cada mes que se lo descuentan.

Un poco más arriba en la jerarquía de una empresa, nos podemos encontrar ya con una Jefatura. Este jefe de área recibe un sueldo de $4.000.000.- brutos al mes (cifra más que importante) de los cuales tiene descuento de $289.850.- por AFP, $177.356.- por Salud, $22.831.- por Seguro de Cesantía y $229.400.- por Impuestos!.

Aquí ya se siente feo el dolor como dirían algunos. $229.400.- de descuentos sólo por impuestos es bastante notorio y se puede ver que estando ya en el tramo del 23%, la cosa se pone más dura lo que implica que en realidad este Jefe de Área llegue a su casa con un cheque mensual de $3.280.563.- teniendo descuentos por un total de $719.437.- de los cuales casi un tercio corresponden a impuestos (impuestos por ganar más, así de simple).

Aquí nos iremos a un ejemplo ya del último tramo de la tabla (nos saltamos un par) y nos encontramos con un Gerente General de una Gran Empresa. Este profesional y directivo a la vez recibe un sueldo nada despreciable de $25.000.000.- por la inmensa responsabilidad que conlleva su cargo y el perfil que este conlleva para su ejecución exitosa. 

De esos $25.000.000.-, este Gerente tiene descuentos de $289.850.- por AFP, $177.356 por Salud, $22.831.- por seguro de Cesantía (hasta aquí todo igual al ejemplo anterior) y una durísima aplicación de $7.690.547.- pesos por concepto de impuestos (es una locura de tributo).

Finalmente de los $25.000.000.- este Gerente recibe en su mano sólo $16.819.416.- y digo sólo porque el total de los descuentos aplicados fue de $8.180.584.- que fueron casi todos en impuestos.

Como se puede apreciar en los ejemplos mostrados, a medida que el nivel de ingresos aumenta, los impuestos también lo hacen y no de forma proporcional sino que se van aplicando tasas cada vez más altas (llegando hasta el 40%), siendo un tópico muy polémico.

Es importante muchas veces no quedarse con la información de los sueldos o salarios sin conocer bien los descuentos que luego tienen, sobre todo en tributos que para una parte importante de la población ni siquiera se imaginan lo terroríficos que pueden llegar a ser.

El tema de ir aplicando impuestos más altos a medida que los ingresos sean mayores parece una idea bastante buena para ir atacando la desigualdad social (tema tan manoseado por los políticos) e ir “distribuyendo mejor la riqueza” sin embargo, desde el punto de vista liberal o simplemente por el mérito, puede parecer un castigo al éxito o peor aún, al esfuerzo y trabajo que realizan quienes obtienen mayores ingresos ya que la razón por la cual los obtienen, tiene algún componente de enlace como el esfuerzo, riesgo de la actividad, dedicación requerida, cantidad de horas producidas, responsabilidad del cargo que desempeña, nivel de especialización, etc… Es de lógica conclusión que difícilmente se pague de forma alta a alguien simplemente porque sí (porque a un empleador por ejemplo se le dé la gana hacerlo de buen corazón), sino que existe una o varias razones como las anteriormente mencionadas para que alguien obtenga ingresos por sobre el promedio y esas razones por lo general, le hacen un merecedor de lo que gana.

También es importante mencionar que en otros países como en México o España se comienza a gravar fuertemente sobre la renta desde salarios bajos en adelante, siendo los impuestos mucho más altos que en Chile. Por su parte las sociedades escandinavas son reconocidas a nivel mundial por sus altas tasas de tributación con lo que sus ciudadanos viven acostumbrados obteniendo en contraparte una mayor oferta de servicios del Estado (en otro artículo escribiré más profundamente acerca de esto).

Teniendo en cuenta que existen en casi todas las situaciones, merecidas razones para que alguien que obtiene un alto salario o sueldo lo tenga, la crítica que nace es respecto a por qué el Estado con su aparato represor legal que incluso le permite hacer uso legal de la fuerza, impone un “castigo” aplicando impuestos cada vez más altos dependiendo del nivel de ingresos de quien lo produce. ¿No es esto realmente injusto? ¿No es más injusto que alguien que se gana merecidamente su dinero, tenga que pagar impuestos por ello o al menos más que los demás? o como dirían los liberales más agresivos, ¿no es este un robo del Estado para esta gente?. ¿Es la “justicia social” realmente justa aplicando tributos de esta manera?.

Creo que el debate es duro, intenso, da para mucho y estoy seguro que quienes lean este artículo tendrán una posición al respecto, ya sea a favor o en contra de la presión fiscal sobre quién produce los ingresos y sus tramos correspondientes.

Es por eso que me gustaría saber que piensas, coméntanos tu posición. Tu participación como siempre enriquece el debate y siempre es bueno conocer lo que el resto de la gente piensa al respecto.

Rodrigo Aguila Bahamonde
Rankia Chile