Es cierto que hay cosas que se deben mejorar o cambiar en España y no son pocas, pero no por ello, hay que dejar "tirado" a un país con esa riqueza cultural, esa historia... y no en vano es uno de los destinos preferidos por los turistas para pasar sus vacaciones.
Somos como somos, no somos perfectos ni mucho menos, pero tenemos una variedad que es la que enriquece todo el paisaje.
La historia está para conocerla y no cometer los mismos errores en el pasado, pero no para estar lamentándose constantemente de lo que pasó hace 40 o 400 años.
España no es un producto tóxico, sino un producto que necesita ir al taller para que le cambien el motor, chapa y pintura.