Después de que hayamos visto varias semanas de intensa volatilidad en los mercados de renta variable y especialmente en el mercado de divisas, lo cual nos ha dado la oportunidad de hacer estrategias de arbitraje financiero, vemos que las aguas vuelven a la calma.
El mercado de divisas ha seguido manteniendo un escenario de crecimiento para el dólar, lo cual sigue siendo bueno para la economía interna de EEUU, pero seguirá generando problemas para su principal mercado (exportador) en los próximos meses y años. Los conflictos comerciales con China no van a cesar porque a ninguno de los dos les interesa que paren.
Esa guerra de divisas, seguirá siendo una realidad.
Como podemos ver, la confianza del consumidor en EEUU se ha instalado en un en un plano de dudas. La evolución era positiva y la tendencia era de claro crecimiento, pero las decisiones del gobierno de Donald Trump con respecto a la Pandemia actual, generan mucha incertidumbre en las grandes economías y las grandes empresas estadounidenses y eso se refleja en el dato de Confianza de EEUU. Ahora mismo se sitúa en 86,00, cifra que se veía desde mayo de 2014.
Los niveles de volumen se vuelven a mantener estables y con cifras intermedias, sin nada que destacar y dejando el escenario correcto para poder trabajar con estrategias de calma, en contra de volatilidad. Lo bueno de este escenario es que si los precios quieren romper niveles de resistencia de corto plazo y lo quieren hacer con una cifra de volumen que sea característica, no necesitarán mucho desgaste para ello.
Como podemos observar en el gráfico del VIX, la volatilidad actual sigue por encima de 25,00, que representa un escenario de cierta volatilidad, pero nada comparable con lo que podíamos ver hace semanas, con un VIX que llegó a alcanzar niveles de 82,00, cifras muy preocupantes que dejaban una situación difícil para operar y dando la posibilidad solo a estrategias de arbitraje financiero, mientras que en el escenario actual también podemos realizar estrategias en contra de la volatilidad.
La bajada de los precios en el VIX ya no va siendo tan agresiva y deja una situación de posible parada y comienzo de acumulación. Esto se confirmará, o no, en las próximas semanas.
Por otro lado, en el gráfico semanal podemos observar el claro crecimiento del dólar desde enero del año 2018.
La caída en los precios del EURUSD es representativa por ambos lados, en primer lugar el crecimiento y la clara apreciación que ha tenido el dólar en estos meses y, por otro, la debilidad que representa el euro con la escasa y muchas veces poco útil actuación por parte del Banco Central Europeo.
Todo esto genera una debilidad en la evolución de los precios de la paridad principal, en la que vemos una tendencia claramente bajista a medio plazo y en la que, a medida que los precios se han ido acercan a niveles de resistencia se ha visto acumulación de papel (dinero vendedor) y perdiendo niveles de soportes con gran facilidad.
En los indicadores técnicos seguimos viendo la rápida descarga de la sobreventa que se acumula a corto plazo y que devuelve los precios hace las resistencias principales y, sin conseguir superarlas, vuelven de nuevo a retomar las caídas.
Mientras que las decisiones del gobierno estadounidense sigan en la misma línea, fortaleciendo al dólar a corto plazo; mientras que el BCE siga sin tomar medidas contundentes, debilitando más aún al euro y mientras que los precios no superen resistencias de corto plazo y, por tanto, la parte alta del canal bajista que vemos, no podremos hablar de cambio de tendencia.