Uno de los proyectos que nos planteamos al llegar a la adultez es el tener una vivienda propia, para eso, comienzan a ahorrar dinero desde su primer empleo. Cuando han juntado lo suficiente para pagar el pie de una propiedad comienzan las negociaciones para acceder a un crédito hipotecario
Uno de los grandes objetivos al llegar a la adultez es tener una vivienda propia. Para lograrlo, muchos comienzan a ahorrar desde su primer empleo con la intención de reunir el dinero necesario para el pago inicial, conocido como el "pie" de la propiedad. Sin embargo, surgen muchas dudas en torno a cuándo se paga el pie de una propiedad y cómo funciona este proceso. En este artículo, te explicaremos todo lo que necesitas saber
¿Qué es el pie de una propiedad?
El pie de una propiedad es el pago inicial que realizas al adquirir una vivienda, y suele representar un porcentaje del valor total del inmueble. Normalmente, este porcentaje es del 20%, aunque puede variar dependiendo de la política del banco, el tipo de propiedad o tu capacidad financiera. Este pago no es financiado por el banco y debe provenir de tus ahorros o de otros recursos propios.
El pie garantiza que puedes asumir parte del costo del inmueble, lo que representa para las instituciones financieras un indicativo de tu capacidad de pago del crédito hipotecario.
¿Cuándo se paga el pie de una propiedad?
El pago del pie de una propiedad se realiza durante el proceso de compra, en una serie de etapas clave que detallamos a continuación:
1️⃣ Cotización y búsqueda de la propiedad
Lo primero que debes hacer es definir el tipo de propiedad que deseas adquirir y verificar que cuentas con los ahorros suficientes para cubrir el pie. Puedes investigar en inmobiliarias o plataformas en línea que te permiten comparar precios de viviendas nuevas, usadas o en proyectos.
Una vez que encuentres una vivienda que se ajuste a tu presupuesto y necesidades, deberás solicitar una pre-aprobación de crédito hipotecario para asegurarte de que el banco te financiará el resto del valor de la propiedad.
2️⃣ Reserva de la propiedad
Cuando hayas decidido cuál será tu futuro hogar, el siguiente paso es reservar la vivienda, lo que suele implicar el pago de una pequeña suma o reserva inicial para asegurar que no sea vendida a otra persona.
En este momento, deberás formalizar la compra firmando una Promesa de Compraventa. Este es un contrato legal que garantiza tu intención de compra y es aquí donde se concreta el primer pago del pie de la propiedad. Generalmente, este pago inicial puede ser fraccionado o pagarse en su totalidad según lo acordado con el vendedor.
3️⃣ Pago del pie y trámites hipotecarios
Una vez firmada la promesa de compraventa, la siguiente etapa es finalizar el pago del pie de la propiedad. Dependiendo del tipo de acuerdo, es posible que tengas que hacer un abono inicial y luego completar el monto total del pie antes de firmar la escritura definitiva.
Durante este tiempo, el banco llevará a cabo la tasación de la propiedad, revisará tu situación financiera y te ofrecerá el crédito hipotecario para cubrir el porcentaje restante del valor del inmueble.
4️⃣ Firma de la escritura y entrega
Después de completar los trámites legales y contar con la aprobación de tu crédito hipotecario, se procederá a la firma de la Escritura de Compraventa ante notario. En este punto, deberás haber completado el pago del pie acordado. Con la escritura firmada, la propiedad queda a tu nombre.
Finalmente, una vez completados todos los trámites financieros y legales, la inmobiliaria o vendedor coordinará la entrega de la propiedad.
¿Qué pasa si no tengo el 20% para el pie?
En algunos casos, los bancos permiten financiar un porcentaje menor del pie o acceder a subsidios gubernamentales que te ayudan a completar este pago. Por ejemplo, en países como Chile, existen subsidios habitacionales que permiten a personas de bajos recursos o jóvenes acceder a financiamiento con un pie reducido o con condiciones especiales.
Consejos para reunir el pie de una propiedad
A continuación te mostramos algunos consejos que te servirán para conseguir reunir el pie de una propiedad:
Planifica tus ahorros: Considera abrir una cuenta de ahorro específica para la vivienda. Algunas entidades financieras ofrecen incentivos para quienes destinan parte de sus ingresos mensuales a este objetivo.
Evalúa opciones de subsidios: En muchos países existen programas de subsidios habitacionales o ayudas estatales para la compra de viviendas, especialmente para jóvenes o familias.
Analiza diferentes alternativas de crédito: Si no puedes cubrir el 20% del pie, explora opciones de financiamiento que te permitan reducir esta carga inicial, como créditos complementarios.
Con estos puntos claros, ahora tienes una idea más precisa de cuándo se paga el pie de una propiedad y cómo se distribuye a lo largo del proceso de compra. Asegúrate de contar con un plan financiero sólido para que puedas alcanzar el sueño de tener tu hogar propio sin inconvenientes.
