A estas alturas, ya estamos acostumbrados a ver titulares relacionados con las criptomonedas en portales y diarios cada día. A veces, se trata de noticias buenas, mercados que se abren y precios que se disparan. Otras, el panorama no resulta nada alentador y se habla de caídas e incluso de “la muerte del Bitcoin”...
Sin ir a los extremos amarillistas, podemos afirmar que las criptomonedas han tenido sus idas y vueltas en los últimos años. Luego de un 2022 teñido de rojo para estos mercados, 2023 dio paso a una recuperación gradual que terminó de consolidarse en 2024, impulsada por Bitcoin y algunos eventos en torno a la principal criptomoneda.
A continuación, te proponemos un pantallazo de la situación actual en torno a las criptomonedas. ¿Dónde están paradas en términos de adopción, regulaciones y posibilidades para los usuarios?
Adopción y popularidad de las criptomonedas
En los últimos años, la adopción de criptomonedas creció de manera notable a nivel mundial, y América Latina no es la excepción. La región, lamentablemente caracterizada por su inestabilidad económica en muchos casos, encontró en las criptomonedas una vía para lidiar con problemas como la inflación, la devaluación de las monedas locales y la falta de acceso a los servicios financieros tradicionales.
Según un informe reciente de Binance, el uso de criptomonedas en América Latina creció un 116% en número de usuarios durante 2023, con más de 55 millones de personas. En el mundo, se calcula que los usuarios de criptomonedas ya son más de 560 millones, lo que es un 30% más que en 2022.
La proliferación de aplicaciones de pago y transferencia de dinero, como Binance Pay, que registró un aumento del 61% en usuarios activos en la región, es un claro ejemplo de cómo las criptomonedas están conectando con las necesidades cotidianas de los latinoamericanos. Muchas otras plataformas ofrecen soluciones similares, incluso con tarjetas de débito emitidas por Visa o Mastercard que permiten pagos con criptomonedas (haciendo la conversión a la moneda local de forma automática e instantánea) en casi cualquier comercio.
En particular, México y Venezuela ofrecen dos ejemplos ilustrativos del impacto de las criptomonedas en la región. En México, el envío de remesas se ha convertido en uno de los usos más extendidos de Bitcoin, debido a los menores costos de transacción en comparación con los servicios tradicionales. Por otro lado, en Venezuela, donde la inflación ha socavado el valor del bolívar, las criptomonedas son vistas principalmente como una reserva de valor, de modo que ayudan a las personas a proteger su patrimonio frente a la devaluación. Algo similar ocurre en Argentina, donde el cepo cambiario también complica las transferencias en moneda extranjera para individuos y empresas.
En el último párrafo, nombramos en pocas líneas tres soluciones concretas que cientos de miles de personas encuentran gracias a las criptomonedas. Viéndolo de este modo, es claro que la adopción de este tipo de activos digitales tiene sentido.
PAÍS | PROBLEMÁTICA | INNOVACIÓN |
Argentina | Cepo cambiario e impuestos en pagos con moneda extranjera. | Uso de criptomonedas para reserva de valor y pagos al exterior. |
México | Altas comisiones en pagos transfronterizos. | Bitcoin para envío de remesas al exterior. |
Venezuela | Devaluación de la moneda local. | Ahorro en criptomonedas estables como USDT o USDC. |
Y a todo esto, podemos sumar otros factores que promueven la adopción de criptomonedas en todo el mundo. Hablamos de los fondos cotizados en bolsa (ETF por sus siglas en inglés) de criptomonedas, que surgieron como una puerta de entrada para inversores institucionales (y multimillonarios) que desean exposición a Bitcoin y Ethereum sin tener que lidiar directamente con la tenencia de las criptomonedas.
A principios de 2024, se lanzaron en Estados Unidos varios ETFs de Bitcoin. Estos lograron atraer un flujo neto impresionante de aproximadamente USD 17.000 millones en inversiones desde enero. El evento renovó el interés en las criptomonedas como un activo de inversión.
El impulso también se ha trasladado a Ethereum, con la reciente aprobación de ETFs spot de ether en julio de 2024, lo que marca un hito importante para la segunda criptomoneda más grande del mercado. Aunque los ETFs de Ethereum han tenido un comienzo más modesto en comparación con los de Bitcoin, se espera que su impacto crezca conforme más inversores busquen diversificar su exposición a criptoactivos, atraídos por la versatilidad y utilidad de la red Ethereum.
Desde su lanzamiento, estos fondos han enfrentado flujos netos mixtos, con algunos días de salidas importantes, aunque la tendencia a largo plazo parece positiva. Este desarrollo resalta cómo los ETFs están facilitando una adopción más amplia y madura de las criptomonedas, moviéndolas del margen de la economía a un espacio más central en el mundo financiero.
Situación regulatoria en Chile
En líneas generales, la situación regulatoria de las criptomonedas en el mundo está “verde”, en el sentido de que todavía hay mucho por madurar y mejorar.
Chile no escapa a esa realidad, pero sí es cierto que el escenario en el país cambió con la aprobación de la Ley Fintech, que entró en vigencia en febrero de 2023.
Esta ley establece un marco jurídico que abarca tanto a las fintech, es decir a las empresas de servicios financieros basados en tecnología, como a las criptomonedas, aunque de manera implícita. Según han explicado expertos de la comunidad en Chile, la ley no menciona directamente a Bitcoin o a las criptomonedas como medios de pago o inversión, sino que las considera como activos financieros especulativos que existen en internet.
Pero eso no es malo, precisamente. A través de este marco, se regula el funcionamiento de las plataformas de intercambio (los exchanges), a las cuales se les exige que cumplan con ciertos estándares, como usar protocolos antilavado de dinero y mantener un patrimonio mínimo.
La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) se encarga de supervisar el cumplimiento de esas normativas, cuya finalidad es lograr un ecosistema con un carácter regulado y seguro.
Además de esta regulación, la Ley Fintech tiene como objetivo promover la innovación, la competencia y la inclusión financiera en Chile, un país cuya economía destaca por su estabilidad y sofisticación dentro de la región.
Para el sector cripto, esto podría suponer un impulso. Representantes de plataformas locales como Buda.com, que participaron activamente en la creación de la ley, esperan que esta normativa no solo aporte mayor certeza jurídica, sino que también convierta a Chile en un hub regional de servicios financieros.
La ley podría permitir que actores locales se expandan hacia otros mercados, a la vez que establece bases sólidas para la interacción entre bancos tradicionales y empresas fintech. Este es un punto importante ya que la relación entre estos sectores no siempre ha sido la mejor y más pacífica; a mediados de la década pasada, los bancos tomaron la decisión de bloquear cuentas relacionadas a plataformas de criptomonedas.
En síntesis, el potencial de Chile para ser un referente en la región en términos de criptomonedas y servicios financieros es notable, especialmente si se desarrollan nuevas regulaciones específicas que detallen más concretamente cómo se manejarán las criptomonedas. De esta manera, el país puede ponerse en línea con otros vecinos como Argentina y Paraguay, donde las criptomonedas también representan actividades importantes para sus habitantes.
Principales plataformas y exchanges en Chile
En Chile, el interés de la población por las criptomonedas ha empujado el surgimiento y crecimiento de plataformas en las que se pueden comerciar este tipo de activos. Asimismo, la promoción por parte de las empresas completó la simbiosis y ayudó a que bitcoin y sus pares lleguen a más chilenos. Todo se favorece con avances regulatorios que, de a poco, abrazan a este tipo de tecnologías.
Entre las principales plataformas que dominan el mercado chileno se encuentran plataformas regionales como Cryptomarket, SatoshiTango y Buda.com, así como también hay alternativas internacionales, tales como Binance, Coinbase, eToro, Bit2me y Uphold. Estos exchanges figuran entre los más elegidos tanto por su oferta de activos como por su facilidad de uso, métodos de depósito en pesos chilenos (CLP) y soporte local.
Binance, líder mundial en el rubro, se posiciona como una de las plataformas líderes en Chile y en gran parte de América Latina, gracias a su liquidez y variedad de servicios, que incluyen trading de futuros, staking y préstamos. Según datos recientes, Binance cuenta con más de 200 millones de usuarios a nivel global y es una de las opciones predilectas en Chile, debido a su oferta de más de 350 criptomonedas. La plataforma permite depósitos a través de transferencias bancarias locales, lo que facilita el acceso al mercado para el público chileno.
Buda.com, fundada en 2015, es una plataforma que ha logrado consolidarse como una de las principales opciones para la compra y venta de criptomonedas en la región. Tanto en Chile como en Argentina, Colombia, Perú y más países, ofrece la posibilidad de comprar y vender criptomonedas con comisiones competitivas y una interfaz fácil de usar. Tiene funcionalidades que apuntan a los usuarios minoristas pero también se pueden abrir cuentas para empresas, incluso con posibilidades de acuerdos OTC (Over the Counter, con condiciones acordadas por fuera de las pautadas por el mercado en un momento dado).
Otra plataforma relevante es Cryptomarket, que se fundó en Chile en 2016 y ha expandido su alcance a países como Argentina y Brasil. En su momento, fue uno de los adalides de la “batalla” legal contra los bancos. Este exchange destaca por su facilidad de uso y seguridad, de acuerdo con lo que destaca la empresa en su sitio web oficial.
SatoshiTango, por su parte, es una plataforma con una oferta variada de criptomonedas y opciones avanzadas como el margin trading, una modalidad que permite “apostar”, por así decirlo, a la caída o al alza de una criptomoneda en particular. Así como las anteriores, ha expandido sus operaciones a demás países de la región, como Argentina, Brasil y Perú, aunque está disponible también en muchos otros lugares del mundo.
Riesgos y desafíos en el mercado chileno
A pesar de los avances, la región también enfrenta desafíos importantes. Si bien algunos son de índole general, otros repercuten de forma distinta en cada país de acuerdo con condiciones específicas, como la legislación y el estado de la economía en cada caso.
Si más o menos has leído algo sobre criptomonedas antes, y mucho más si eres un usuario o inversor, sabrás que uno de los principales desafíos es la volatilidad de estos activos, una cualidad que afecta la confianza del público y puede llevar a pérdidas de dinero. Aunque pueda parecer un detalle, en realidad la volatilidad alimenta la suspicacia de los reguladores e inversores, y a su vez genera un halo de confusión que permite a los estafadores ofrecer ganancias irreales sin que muchas personas detecten la trampa.
Pros
- La Ley Fintech reconoce a las criptomonedas y comienza a darles un lugar en la economía formal.
- Las redes de criptomonedas (al menos las más populares y usadas) son casi imposibles de hackear.
- Mediante elementos financieros como los ETF, inversores de todo el mundo se fijan en BTC y ETH.
- Las criptomonedas pueden facilitar el comercio entre personas y empresas de Latinoamérica.
- Iniciativas públicas y privadas en Chile tienen como meta educar sobre las nuevas herramientas financieras.
Contras
- La volatilidad de las criptomonedas genera desconfianza en muchas personas.
- Siguen sucediendo hackeos a plataformas y wallets centralizadas.
- Los intentos de estafas proliferan y mucha gente cae en ellas.
- La tecnología avanza rápido y las legislaciones se quedan atrás, lo que genera vacíos legales que pueden aprovechar actores con malas intenciones.
Otro factor de riesgo importante es la seguridad, ya que las criptomonedas operan en un entorno digital en el que los hackeos y fraudes son frecuentes. Es importante destacar aquí que la tecnología de las criptomonedas en sí, como Bitcoin o Ethereum, no falla nunca y es casi imbatible. Lo que sí falla son las plataformas centralizadas donde se comercian o almacenan criptomonedas.
En Chile, las autoridades han advertido sobre esquemas Ponzi y estafas relacionadas con proyectos falsos de criptomonedas que han afectado a usuarios desprevenidos.
Además, la falta de regulaciones claras para soluciones financieras novedosas, como los protocolos DeFi, sigue siendo un desafío que aumenta el riesgo. Como se suele decir, la tecnología avanza mucho más rápido que las leyes, y esto da lugar a grises y vacíos legales que lleva tiempo corregir.
Finalmente, si se pretende la adopción masiva de las criptomonedas, no se puede obviar el enorme desafío que supone mejorar la educación financiera y tecnológica de la población. Esto es algo que comienza a tomar forma mediante asociaciones entre organizaciones privadas y entes públicos.
Por ejemplo, en Argentina, se anunció el 23 de febrero un programa educativo que se aplicará en escuelas secundarias de la ciudad de Buenos Aires. En tal programa, los jóvenes no solo aprenderán cuestiones básicas sobre Ethereum y su ecosistema, sino que además adquirirán nociones básicas acerca de cómo redactar contratos inteligentes operativos en esa red. Sin dudas, una idea que bien podría replicarse en otros países también.
Innovaciones y proyectos locales
Chile está ubicado como un semillero de innovación en el ámbito de las criptomonedas y la tecnología blockchain. En los últimos años, una serie de proyectos locales surgieron para impulsar la adopción y el desarrollo de este ecosistema.
Por ejemplo, la empresa Colledge, a través de su incubadora de negocios enfocada en blockchain y criptoactivos, apoya el crecimiento de startups locales que tienen el potencial de liderar el ecosistema latinoamericano. En un evento reciente, seis proyectos finalistas presentaron sus iniciativas ante inversores y aceleradoras. Participaron startups que trabajan en áreas como los pagos transfronterizos y las finanzas descentralizadas, con posibles soluciones a problemas financieros a través de aplicaciones basadas en blockchain.
Por otro lado, eventos como el CriptoSummit 2024, que tuvo lugar en marzo en Santiago, son fundamentales para fortalecer el ecosistema cripto en el país. Este evento reunió a más de 500 personas y 40 especialistas de la industria, quienes compartieron conocimientos y discutieron sobre el futuro de las criptomonedas y blockchain en la región.
Estos eventos y proyectos no solo fomentan la innovación, sino que también proporcionan las herramientas necesarias para que Chile continúe avanzando en el desarrollo de la tecnología blockchain.
En conclusión, el mercado de las criptomonedas en Chile se encuentra en un proceso de consolidación, impulsado tanto por la adopción local como por la creciente innovación en el espacio tecnológico. A medida que el marco regulatorio evoluciona y se implementan más proyectos locales, el país se posiciona mejor como un referente regional en el ecosistema cripto.