El análisis top-down o análisis bottom-up nos ayudan a realizar el proceso de toma de decisiones dentro de una empresa, cada uno de los proceso empieza de una forma distinta, por lo que tiene diferentes metodologías. En el siguiente artículo se van a explicar cada proceso, para conocer la metodología y ejemplos de cómo realizar la toma de decisiones.
¿Qué es el Análisis Top-Down? Metodología
Si realizamos un análisis top-down tomamos las decisiones de inversión partiendo de variables globales, es decir, el proceso se desarrolla pensando en una visión global de cómo va a funcionar todo. Posteriormente se van definiendo los grandes componentes del sistema para, poco a poco, ir descendiendo hacía variables más específicas o pequeñas. En otras palabras, estamos frente un análisis que inicia desde lo macro (global) y desciende hasta lo micro (especifico).
Por tanto, al momento de realizar un análisis top-down la metodología para la toma de decisiones sigue estos pasos:
- Primero analizamos la situación del ciclo económico internacional para poder saber cómo influirá esa variable en las estimaciones que vaya a realizar el analista sobre una determinada empresa.
- El siguiente paso es analizar las perspectivas de las economías nacionales o domésticas respectivas.
- Después, en cada una de las economías nacionales debemos prestar atención a los diferentes sectores para ver cuál o cuáles de ellos crecerán más que la economía en general y también saber y conocer qué sectores crecerán menos.
- Por último, se debe realizar un análisis más específico sobre los aspectos de cada empresa. En este análisis se debe tomar en cuenta la situación competitiva de cada compañía. Para ello se toman en cuenta el estudio de las siguientes variables:
- Cuota de mercado
- Barreras de entrada
- Rentabilidad de la empresa
- Calidad del producto
- Eficiencia en los costes
- Éxito de inversiones pasadas
- Apalancamiento
- Evolución de los beneficios
- Determinación del precio objetivo
¿Qué es el Análisis Bottom-up? Metodología
En el Análisis Bottom-up el proceso de toma de decisiones es todo lo contrario al top-dowm. En este segundo análisis el proceso empieza por los detalles y las partes más pequeñas, intentando solucionar los problemas más pequeños, que conjuntamente generan soluciones a otros problemas más grandes dentro de una empresa.
En otras palabras, el análisis Bottom-up aborda la toma de decisiones desde una posición individual para pasar posteriormente a variables más globales.
Ahora bien, para aplicar el análisis Bottom-up se debe seguir los siguientes pasos:
- Primeramente se debe realizar un análisis concreto de la empresa, estudiando su posición competitiva:
- Cuota de mercado
- Barreras de entrada
- Rentabilidad de la empresa
- Calidad del producto
- Eficiencia en los costes
- Éxito de inversiones pasadas
- Apalancamiento
- Evolución de los beneficios
- Determinación del precio objetivo
- El siguiente paso es analizar el sector al que pertenece la empresa, para conocer la evolución del sector y las oportunidades o amenazas que se presentan.
- Por último, se debe analizar la economía nacional y la economía internacional, para saber si hay alguna variable que pueda influir en la empresa que estamos analizando.
Análisis top-down y bottom-up: Ejemplos
A continuación vamos a ver algunos ejemplos de lo que analizaríamos de una compañía:
- Economía: momento del ciclo económico, evolución del PIB, análisis de la demografía, evaluación de la tendencia del mercado, cargas impositivas, comportamiento del dólar frente a otras divisas...
- Mercado de capitales: evolución tipo de interés, mercado bursátil...
- Análisis sectorial: demanda del producto, nuevos productos, nuevas marcas, análisis de la competencia, regulaciones que afectan a la producción o comercialización...
- Factores de la compañía: expectativas de crecimiento, productos y futuros productos, márgenes previstos de ganancias.
Para visualizar más a profundidad cómo se aplican el análisis top-down, tenemos como ejemplo el caso de una inversión, en donde el análisis inicia con la evaluación de la situación macroeconómica (mercado internacional), para pasar luego a evaluar la economía nacional y local. Y posteriormente se analizaran variables específicas de la empresa (teniendo en cuenta su posición competitiva, la cuota de mercado, la calidad del producto, la rentabilidad, los costes).
En el caso del análisis bottom-up, un ejemplo calor de cómo se aplica podría ser a través de una empresa constructora, la cual tiene como proyecto construir un conjunto de viviendas. Y para ello, es necesario realizar un estudio para valorar el sector, como ver cuántas empresas van a construir proyectos iguales como los nuestro, con el fin de ver si habrá suficiente demanda de compra para lo que se pretende construir. Por consiguiente esto nos lleva a evaluar el ciclo económico del país, ya que, si el país está en recesión llevar a cabo la construcción de viviendas puede resultar en grandes pérdidas millonarias para la empresa.
Conclusión
En conclusión, conocer sobre los análisis de top-down y bottom-up, permite al futuro empresario o emprendedor evaluar cual técnica sería la más viable para la toma de decisiones y la que se adapta a la misión y visión de la empresa. Debemos recordar que ambos análisis literalmente funcionan uno a la inversa del otro, mientras el top-down aplica el método de análisis de lo macroeconómico a lo microeconómico (arriba hacia abajo), el bottom-up inicia de lo microeconómico hasta llegar a lo macroeconómico (de abajo hacia arriba).